jueves, 24 de noviembre de 2011

Troyano



El Derecho no es la Matemática, hasta ahí llegamos todos. Casi todos.
Pero las cosas del Derecho tienen su matemática, y los fallos de la Justicia su aritmética. Nunca debería olvidarse que Bildu se volvió legal de la noche a la mañana, no por un consenso unánime de expertos magistrados, sino por la mínima de seis votos contra cinco, entre los miembros del Tribunal Constitucional (TC).
Y no sólo el Tribunal estuvo dividido. También las asociaciones judiciales discreparon sobre si el TC se había excedido en sus funciones, como se decía en los votos particulares de dicha minoría; pues tampoco hay que olvidar que el meollo de la sentencia era casar otra del Tribunal Supremo en sentido contrario.
Así en mayo la situación, lejos de ser clara, bailaba en el filo de la espada justiciera, y Bildu seguía bajo sospecha. Tan en el filo, que el propio TC legalizador incluía esta reserva insólita: «Puede que en el futuro la sospecha quede confirmada…»
Curioso. Tan curioso, que me voy a copiar entero el art. 13 de la sentencia, tan subscribible  para Íñigo Iruin, el abogado de Bildu, como si él mismo lo hubiese redactado:

13. Conviene concluir resaltando que la simple sospecha no puede constituirse en argumento jurídicamente aceptable para excluir a nadie del pleno ejercicio de su derecho fundamental de participación política.
Puede que en el futuro la sospecha quede confirmada, pero para el enjuiciamiento actual, la misma no podría conducir a un resultado limitador, so pena de dejar en lo incierto el ámbito del libre ejercicio de los derechos de participación política garantizados en el artículo 23 CE y, con ello, el valor del pluralismo político sobre el que se fundamenta el ordenamiento constitucional del Estado democrático.
La pretensión de asegurar a ultranza, mediante controles preventivos, la seguridad del Estado constitucional pone muy en primer lugar en riesgo al propio Estado constitucional.

Hombre, no.  Aparte el tranquillo (‘pretensión’, ‘a ultranza’), hagamos analogía: El control preventivo del pasaje de un avión para impedir que se cuelen terroristas podrá ser molesto, irritante, humillante, lo que se quiera; pero no se diga que pone en riesgo  ¡¡muy en primer lugar!! el propio avión y la seguridad del vuelo. Sigamos:

Tal pretensión resulta además desproporcionada a la vista de la panoplia de instrumentos de control a posteriori de que se ha dotado, mediante las últimas reformas legales, nuestro ordenamiento.

Aquí el retintín roza la pulla y la mala uva: pretensión desproporcionada, panoplia, control a posteriori, las últimas reformas legales… ¿Pero qué lenguaje ese este? Asombroso, desde luego lo es, que un alto Tribunal se permita la ironía y la zumba como remache de una casación de sentencia de otro alto Tribunal, el Supremo, nada menos. Como en un pique entre coleguis. No es extraño que la mitad de los jueces del TC se hayan sentido extraños al extrañísimo fallo. 

«Puede que en el futuro…»
El futuro de aquel 5 de mayo era pretérito ya en las elecciones del 22, favorables a Bildu, y más en las del 20-N, que han metido a la coalición en las Cortes Generales y el Senado.
Diríase que en siete meses no se ha movido un dedo la espada de Damocles que el TC dejó pendiente en forma de sospecha. Ni un paso en falso, ni un indicio nuevo. Nada que invite a poner en cuarentena a antiguos apestados, que por otra parte tampoco han perdido todo contacto con la peste. Nadie que diga «ese rabo, esas orejas», a la gente nueva que nos va a guardar el aprisco y el gallinero. 
¿De qué sirve un tribunal así? Unos jueces mejor dispuestos hacia los neófitos de la víspera que hacia los demócratas de siempre, con sus magistrados a la cabeza. Eso es como disponer de un antivirus que ignorase los troyanos, argumentando que sus bits son tan bits como los demás. Y si causan daño ya se arreglará, tampoco exageremos...
Lo del virus troyano me ha venido a la mente escuchando y leyendo a Iñaki Antigüedad, un cabeza de lista por Amaiur, electo y dispuesto a tomar posesión de su escaño en Madrid.
Antigüedad es un histórico de Batasuna, que ya fue con Otegi y Josu ‘Ternera’ miembro de la Cámara de Vitoria hace 13 añitos justos, aquel 26 de noviembre de 1998, cuando Atutxa era saludado como «el presidente del primer Parlamento Vasco sin violencia».
Hay quien cita a Iñaki como ‘ideólogo’ de su cuerda, por aquello de que «la vanguardia de la misma no dejaba crecer al músculo social» (2007) etc. La metáfora como ideología, o enseñar en parábolas, da lo mismo. Lo que importa ahora es cómo piensa y se anuncia él en vísperas de recibir su acta de diputado. Entresaco de una entrevista:

– ¿Qué va a aportar Amaiur al Congreso y al Senado?
– El mayor aporte es haber tomado cuerpo.

Tomar cuerpo, músculo social, venga ideología: seguimos de metáfora.

– Les acusan de no tener programa.
– … Habrá que buscar una presión popular y política. Todo lo que hagamos será para fortalecer una mayoría social que diga que este marco está agotado. Sólo entonces podremos llegar al choque de trenes, que decía alguien.
– Usted fue muy crítico con ETA tras el asesinato de Inaxio Uria. ¿ETA ha sido un error en los últimos años?
En los últimos años sí. Yo hago mía la frase de Otegi: «ETA sobra y estorba»… Otra cosa es si me preguntas que dónde pongo el límite hacia atrás. Eso entra dentro de lo personal… Los últimos atentados… marcaron una inflexión importante. Ahora eso está todo superado.

Con que  todo superado. Bien, ¿y ahora?:

– …Una vez desaparecido el obstáculo del que unos hablan, ver la forma en la que se obliga al Estado a reconocer…

Obstáculo…, ¿qué obstáculo es ese ‘del que unos hablan’? Si se refiere a lo que parece, suena como decir: «la violencia de ETA, por así llamarla». Pero obstáculo…, lo que se dice obstáculo para Bildu era el veto del Supremo, vetado a su vez por el TC. Y a partir de ahí, metáforas sobran y se empieza a hablar claro:

«Este Estado no es el nuestro… Jurar, no vamos a jurar, porque este Estado no es el nuestro… Tomaremos el acta y trabajaremos como grupo allí dentro, en España, en Europa…, para reivindicar que queremos el mismo ámbito de decisión que el Estado. Mientras no haya un cambio de los marcos jurídicos y políticos es imposible avanzar. »

Imposible avanzar…, bueno, siempre queda el ‘choque de trenes’: retorno de la violencia, declaración unilateral de independencia, o lo más probable, ambas cosas. En suma: estrategia troyana.
Esa es toda la garantía antivírica del TC. Pero, señores, si un parlamentario electo se permite hablar así, ¿es sensato dejarle ‘tomar el acta’ como quien toma el vermú, y ejercer el cargo público? El desprecio a España y su Constitución es olímpico –TC incluido–, hasta decir en voz alta que nada reconoce ni va con él, y que su interés en el Congreso no es otro que intrigar y maquinar dentro y fuera, en la calle, en Europa, hasta llegar a la ruptura si no se doblega a sus pretensión políticas.
Es inaceptable que los derechos individuales del troyano inconstitucional prevalezcan sobre el mejor derecho de los españoles a no verse amenazados ni agredidos injustamente, al amparo de la Constitución que ellos sí acatan. Tanto dorar una cara de la tortilla, y la tortilla cruda. Eso no está bien.
El garantismo romano tenía un valor supremo de referencia: «Salus populi suprema lex esto» (La ley suprema: el pueblo a salvo). Es curioso: el soberanismo vasco siempre se refiere al ‘pueblo vasco’ o Euskal Herria, no frente a un Pueblo Español, sino frente a un Estado Español. Un Estado «que no es el nuestro», y con que el que romperemos, si no se rinde.
¿Alguien cree en serio que negar el acta de diputado a personas así pone en riesgo máximo, ni tampoco mínimo, al propio Estado Constitucional?
Si, según toda evidencia, se confirma ser lo que ellos sugieren, virus troyanos, algo debería tener pensado el TC para cuando se nos cuelgue el programa. ¿Formatear la Constitución? O mejor todavía, desechar el Estado irreparable, depositarlo con cuidado en algún contenedor ecológico, y agenciarnos otro. Los nacionalistas entienden mucho de fabricar estados, y puede que hasta tengan alguno de segunda mano que nos haga servicio.



4 comentarios:

  1. El choque de trenes se producirá, sin duda, cuando en unos comicios del futuro inmediato los votantes del PNV no resistan los cantos de sirena que llegarán por babor (que no por una auténtica izquierda) y abandonen el propio barco para subirse a una nave pilotada por bucaneros reconvertidos, que nadie sabe dónde nos llevará.

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  2. ¿Reformaterán? Y después del olvido vendrá Schliemann, famoso excavador de códigos fuente, y descubrirá muchas capas de ruina. Como bien dice, las metáforas ni son adornos ni son inocentes, que el vehículo escogido aporta al concepto vehiculado toda la carga nocional y afectiva de las imágenes evocadas, como es destrucción y muerte a mansalva en el, al parecer, anhelado "choque de trenes". Por eso, admirado Belosticalle, me parece tal vez inapropiadamente noble la expresión "troyano", que nos lleva sin remedio a los orígenes de nuestra épica y a un artefacto cargado de héroes. Vamos, que me hará mirar a Antigüedad como un Aquiles preparado para perpetrar toda clase de heroicidades.

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  3. Esa declaración de intenciones tiene un problema, don Belosti:

    El artículo cuarto.

    Como no estoy muy segura de que funcione el link, les copio el citado artículo del Reglamento del Congreso de los Diputados:

    Artículo 4.1. Concluidas las votaciones, los elegidos ocuparán sus puestos. El Presidente electo prestará y solicitará de los demás Diputados el juramento o promesa de acatar laConstitución, a cuyo efecto serán llamados por orden alfabético. El Presidente declarará constituido el Congreso de los Diputados, levantando seguidamente la sesión.

    2. La constitución del Congreso será comunicada por su Presidente al Rey, al Senado y alGobierno.

    Si algunos de los diputados no acatan la Constitución, se plantea un problema en la constitución de la Cámara. Va a ser interesante ver cómo maneja eso el PP.

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  4. Algo de épico no se puede negar, mia cara Elefante, a una gesta que hasta tendría nombre: la Cariogeorgíada, epopeya del cultivo y explotación del nogal, digna de un Hesíodo que la ponga en palabras.

    [Hay un problema filológico menor, y es que no se sabe con exactitud qué especie vegetal entendían los griegos por ‘nogal’: pérsico, de Eubea etc. Pasa con la mayoría de términos botánicos, como usted sabe, y no le estoy llamando herbívora.]

    Épica burlesca no, desde luego. Tiene que ser algo serio, heroico. Otra cosa es que usted ni yo no lo podamos apreciar. Civilizarse tiene sus limitaciones: se pierde la estética culinaria del caníbal, y la heroica del sicario.

    En cuanto al Art. 4.1., coincido con doña Carmen: «a ver cómo lo maneja el PP.» Será una primera pista.

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