Desde que Alicia se redescubre en el espejo, siempre nos tortura la misma paradoja:
—¿Por qué el tipo del otro lado es mi zurdo, pero no mi antípoda?
—¿Cómo, que no? Túmbate y verás.
—¡Ahivá, pues es verdad! Y sigue siendo mi zurdo, pero ahora está a mis pies…
En efecto, para apreciar esto último hay que tumbarse, con los pies hacia el espejo. Lo que indica que, en posición 'normal', derecha e izquierda nos resultan más relativas que arriba y abajo. Seguramente es así desde que un ancestro homínido se puso bípedo. Por eso siempre hay que andar precisando: «A la derecha (la del espectador)» Por eso 'babor/estribor' es problema para mucha gente —incluido el viejo lobo marino del cuento, que lo llevaba apuntado en una chuleta—. Y eso es así en la tierra como en el cielo, donde Cristo está sentado a la diestra de Dios Padre; es decir, a la izquierda según se les adora… En cambio, arriba siempre es arriba y abajo es abajo… al menos mientras no hagamos volatines.
¿Y en política? Para el personal ordinario, eso de 'la derecha' y 'la izquierda' es muy relativ0. No así para los políticos, que por lo visto planean por un espacio absoluto. Sólo así se explica que un señor de Aralar le ha afeado al lendacari socialista López «estar a los pies de la derecha». Y no de cualquier derecha, sino «de la derecha más reaccionaria».
Antes de proseguir, hagamos un experimento. Busquemos en Google «la derecha más reaccionaria». Resultados: 7.190. En cambio, para «la izquierda más reaccionaria» obtenemos 245 solamente. La izquierda es más faltona, aunque su insulto ya es sólo una frase hecha. De paso vemos que 'reaccionario' no es monopolio de la derecha. Adelante.
Aralar es un partido menor, que se autositúa en la 'izquierda aberzale'. Seguramente los de Aralar en su paraninfo político se ven sentados a la izquierda del PSE/PSOE, no lo sé. Sólo sé que, con la indicación del caballero aralaritano, no sé nada sobre dónde se sitúa el Sr. López. Lo único que percibo es que el aberzale tiene de la derecha política en general un concepto negativo, y que una derecha en especial le parece el colmo de la perversión: la que (según él) ocupa el Partido Popular.
Porque ésa es otra. Lo de 'derecha/izquierda', que tuvo origen en las Cámaras francesas del siglo XIX (siempre desde el punto de vista de la Presidencia) y a tenor de los partidos de entonces, con la evolución semántica natural en semejantes cosas se ha cargado de valor maniqueo, y hasta sirve para insultar, llegado el caso. O llegados 7.190 casos.
En esto último, las izquierdas han sido más pertinaces. Niño que me tocó ser de derechas en la República, lo de 'las izquierdas' me sonaba entonces como chusma vitanda, no recomendable, en opinión de monárquicos, carlistas y nacionalistas, que mayormente me rodeaban y eran 'las derechas', por así decirlo, en todo caso la gente de orden. Los otros, de entrada no iban a misa, y cada vez que había gresca política siempre empezaban ellos.
Luego vino Franco con sus extravagancias, eso de pintar el mapa político de España sin puntos cardinales, unas Cortes sin derechas ni izquierdas y un sindicalismo a plomada. Con la transición, el centro cobró cierto lustre; pero mientras el término 'izquierda' pierde carga peyorativa entre unas derechas modernizadas, y por tanto algo izquierdizadas, la propia izquierda en sus nuevos avatares mantuvo el tono negativo agresivo para referirse a 'las derechas'. Acabamos de verlo en Google. Y en ese enredo estamos.
Personas bienintencionadas han buscado dar sentido racional a esa antítesis política, derecha-izquierda, con poco éxito. No he logrado leerme entero el libro de Gustavo Bueno sobre el tema (El mito de la izquierda: Las izquierdas y la derecha, Barcelona, 2003), aunque hasta donde he llegado, me da que el autor tiene su querencia.
Hay quien va más lejos, hacia una 'racionalidad inmanente' de ambos conceptos, en pie de igualdad con las teorías científicas (Newton, Darwin…). Ahí me pierdo. Mi cabeza es demasiado tosca para asociar los partidos políticos al uso con ideologías y sistemas coherentes. ¿A qué negarlo? Tan iguales los veo, que cuando toca votar me recelo de que serían capaces de venderme todos ellos la misma pollina, pues de hecho toda pollina cabal es un organismo bilateral, a base de dos mitades, una derecha y una izquierda, unidas por el centro, como nos explicaba un profesor de Biología que era morfólogo.
Por eso resulta pintoresco que alguien de Aralar reproche a un supuesto colega de izquierdas estar a los pies de una derecha. Si, por ejemplo, la 'función izquierda' implica ante todo «una capacidad de integración de nuevos individuos o grupos de otras culturas…, actuando la derecha en sentido contrario, reforzando relaciones excluyentes» (G. Bueno), que alguien explique el izquierdismo de Aralar y de cualquier otro partido nacional-soberanista vasco.
Pero sigamos leyendo y comparando:
«La característica de la 'función derecha' quedaría correlativamente constituida por estos dos conceptos: el concepto de 'intuicionismo preterrracional' y el concepto de particularismo. Por su componente intuicionista, las 'derechas' se autoconcebirán como alternativas políticas prácticas cuyos principios se dicen inspirados en alguna revelación, ya sea dada a una elite, a un pueblo, o a un individuo ('genialismo' de Fichte, 'individuo carismático' de Weber). Por su componente particularista, las derechas se autoconcebirán principalmente como alternativas políticas orientadas al fortalecimiento de un grupo, raza, pueblo o clase social» ( L.M.G. citando a G. Bueno, «En torno al concepto de 'izquierda política'», pág. 16).
Con ese escantillón, me temo que Aralar no es de izquierdas. Por muy socialista que se autoafirme, lo suyo será siempre nacional-socialismo: la derecha más reaccionaria. Y pueden añadir (si gustan) que a mucha honra; que el que a los suyos se parece, se la merece.
La misma topomitología inspira al socialista Pastor disculpar el pacto de su partido con el PP como 'excepcional'. El mismo pacto que sus adversarios del PNV calificaron como 'contra natura'. ¡Qué cosas hay que oír! Dado que los populares sean de derecha, ¿alguien ve a su izquierda al PNV?
Los propios socialistas pueden tener algún ramalazo de izquierdismo (nadie es perfecto), como cuando Pepe Blanco anuncia que los que cobran nómina o pensión tendrán que repartirla para enjugar el déficit público. Fuera de esas humoradas, nuestros socialistas son tan gente de orden como quien más.
¡Excepcional! Y tan excepcional: coger por los pelos la ocasión de hacerse con el poder sin coste apreciable. Gracias a la sensatez del PP vasco. ¿Es eso ponerse a los pies de la derecha? Pues muy señora nuestra. Porque aparte del propio PSE, que rompe el tabú de Ajuria-Enea, tampoco sale perdiendo el PNV. No sólo ha despertado de un falso sueño de eternidad, sino que se ha librado de un líder tan aventurero y desestabilizador como Ibarretxe.
En una palabra: circularidad. El espectro político actual no está bien representado como derechas e izquierdas con relación a un centro imaginario. Es más como una tabla redonda, donde cada comensal está a la derecha y a la izquierda de los demás, atentos todos y cada uno a un centro de mesa muy real, donde se sirve votante.
Aralar, sentado a la izquierda del Padre (Sabino).
ResponderEliminarFelicidades,querido Belosti, por sus primeras 10.000 visitas. Se las merece, todas ellas y las muchísimas más que tendrá.
ResponderEliminarUn LUIGI vale por mil palabras.
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Gratísima su felicitación, PUSSY.
En efecto, 10.000 visitas. Incluidas las mías propias (este contador 'de regaliz' por lo visto no me reconoce); pero sobre todo, gracias a la promoción amiga.
Claro que importan las visitas, digo, los visitantes. Pero con toda sinceridad, esto nació sin vocación de masas, y si mis elucubraciones interesan y entretienen a un círculo de amigos, misión cumplida.
Las 10.000 visitas de Belosti. ¡¡Enhorabuena!!
ResponderEliminarQuerido Belosti: Como puede ver en su contador, ya son casi 64 visitanes que han venido a ver si ha repuesto cabecera.¿Que pasa puesss?
ResponderEliminarPasa que estoy en Praga, y cada noche caigo molido al catre.
ResponderEliminarMenos mal que esto se acaba, y este fin de semana espero volver para contarlo.
Un abrazo a todos, hasta pronto.